Con ojos de poeta

Mirando ahora con ojos de poeta
palpita en mi centro lo que mora afuera,
creación divina el corazón aquieta
y vuelve una canción todo lo que viera.

A escuchar me pongo el color de la vida,
la flora y  fauna en ideal sincronía,
mi alma las comprende a la primera oída
ansiando no cese tan fiel armonía.

Mi mano corre rápida tras los versos
que abren pródigos este candil sereno
y vuelan con alas tornadas en rezos
cuando miro el mundo y lo imagino bueno.

Orando está la mujer que me acompaña
que de pronto surge al cristal de mi vida
ese reflejo con lágrimas se empaña
al memorar la hoz de alguna vieja herida.

Pero las penas no rebosan mi cazo,
el camino es ancho, voy librando escombro,
me ato a las nubes con figurado lazo
colmada en fe, tibio alivio de mi asombro.

Sólo Dios pudo crear tanta grandeza,
para Él se eleva henchida mi alabanza,
agradece el ser que enalma la belleza
de bendita ofrenda, vasta es la bonanza.

Marysol Salval