Ciudadana del mundo, de aqui y de allá. Enamorada de la vida y agradecida de Dios. Le canto al amor en todos sus matices.







8/18/2008

Caracolas


Aunque quisiera, no me es posible
recoger todas las caracolas hermosas de la playa,
sólo me es posible recoger algunas,
y precisamente son más hermosas por ser unas pocas.


7 comentarios:

Dra Ziella.- dijo...

serán las más hermosas por ser las tuyas...por haberte esforzado por alcanzarlas, por haberlas elegido entre cientos de caracolas...
asi en cada caracola habra un triunfo para nuestra alma...
sigamos buscando caracolas mientras estemos vivos...(y despues? si volvemos con otro traje para continuar la busqueda??)...te dejo un beso que cruza la cordillera! que tengas un muy lindo dia, aqui hay mucho sol espero que te lleguen sus rayos...

Juan Antonio dijo...

Marysol

Bella ilustración en que la linda dama, ¿eres tú?, encuentra una hermosa caracola.
Se entretiene con ella
la palpa, le sonríe
la observa detenidamente
cada detalle.
Es feliz en ese instante
se concentra en ella
se olvida de todo lo que le rodea
momento insuperable
de felicidad y amor.
¡Que seas muy feliz en el día de hoy, mientras observas tu hermosa caracola.

Un afectuoso abrazo

Marysol Salval dijo...

Hola, Maga:
Las caracolas más hermosas, aquellas que atesoramos,como los verdaderos amigos, la familia, los pequeños milagros que nos ofrece la vida.Parece poco, pero es en verdad un universo sin fin.
Por aqui el tiempo nublado, pero a lo lejos vislumbro un hermoso rayo de sol. Son tus buenos deseos para mi.
Un abrazo

Marysol Salval dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Marysol Salval dijo...

Hola, querido Juan: Soy yo y todas las mujeres que sueñan con las cosas bonitas de la vida. Tú eres una de mis caracolas y cuando me escribes esos bonitos poemas, es como acercarte a mi oído y escuchar el murmullo del mar.
Besos para ti

Makeka Barría dijo...

Las más hermosas caracolas son aquellas que nos escuchan susurrar nuestras penas y alegrías... hay que atesorarlas.
Cariños.

Marysol Salval dijo...

Asi es María Angélica: A veces no nos damos cuenta, pero todos tenemos nuestras caracolas. Como bien dices, hay que cuidarlas porque aunque no lo parezca, son muy frágiles.
Un abrazo