Para hablar de amor
Hay que vestir alas
Y ascender a lo más alto
Porque el amor
Se vive en las alturas
Como un ingrávido
Y fabuloso milagro.
Es allí, allí donde
Adquiere la forma
Que le da vida a sus ansias
Un incorpóreo sueño
Que se encarna.
Entonces, en la carne
Es donde nos buscamos
Con las manos, a tientas
Con las voces, susurrando
Con los labios, las bocas
Y el corazón levitando
Inflamado de gozo
Por el prodigio de saber
Que nos hallamos.
Y se abrazan nuestras almas
Estremecidas de lumbre
Desnudas, trémulas
En la unidad de la materia
Que nos conduce a las delicias
De los besos que nos calzan
En un derroche de amor
De este sueño que se eleva
Entre la espuma de los astros
Más allá de las estrellas,
Ingrávido, incorpóreo
Fabuloso milagro
Que se vive en las alturas.
6 comentarios:
uf, que orgasmo mental de amor me has eyaculado querida Marisol.
El Amor es así, unidos, al menos,en el sueño que se cumple
en el interior y otras veces afortunadamente en el exterior también,
aunque sea por un instante o para toda la vida los menos.
Aquellos que son privilegiados y se lo merecen por su crecimiento interior.
Un abrazo, y otro por el enlace, yo quisiera enlazarme pero todavía no se como se hace
Fabuloso es este poema.Inmenso.
Un saludo
Marysol
Fabuloso poema
ingrávido
incorpóreo...
como el amor
que hierve
entre dos amantes
que son uno
volando
más allá de las estrelñlas.
Un beso.
Juan Antonio
El Amor es un Milagro... como la Vida misma...
Un abrazo!
Precioso tu blog amiga. Gracias por compartirlo!
Qué hermoso poema lleno de pasión. Es realmente precioso.
Besitos
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