Amantes (dodecasílabo)

Y somos amantes, nos amamos tanto
como ama el cielo  las cálidas estrellas,
el poeta al ave y a su tierno canto
y el colibrí el dulzor de las flores bellas.

Nos amamos tanto, como lo hace el río
cuando al pasar besa su adorado lecho,
como el sol abraza la estación del frío,
y dulcifica el cáliz que anida el pecho.

Nos amamos tanto, como ama el girasol
cuando espera a Dios dormido en el otoño,
las nubes aman el sonrojado arrebol,
y el tronco seco, el regreso de un retoño.

Nos amamos tanto como respira el pez

la libertad plena en mar cristalino,

y ama la espiga el tiempo de la mies

para ser harina bendita del molino.

Nos amamos tanto que aun nos alcanza
para cruzar la muerte los dos triunfantes,
indisoluble amor, nuestra eterna alianza
¡Es un regalo de Dios!  Somos amantes.

  © - Marysol Salval